Los dioses indígenas de Gyeongseong empiezan a caer como moscas. En Myoyeongak, Lee Yeon le dice a Hong-joo que llevará el tesoro al hotel Bando. Tras una ronda de puñetazos y copas, Lee Yeon le dice a Moo-yeong lo mismo. Mientras tanto, Hong-joo intenta hacer un trato con el comandante jefe para proteger a sus chicas y a Myoyeongak. Todos los demonios van al hotel Bando a por el tesoro.