Jean-Marie Fayard es un juez que tiene un expediente que implica a un rico industrial en una serie de muertes inexplicables. Un juez joven, apodado "el sheriff" por su integridad y sus métodos poco ortodoxos en el mundo de la investigación judicial a Saint-Etienne en un negocio difícil: un caso de robo gasolinera con asalto, lo que implicaría indirectamente de los de arriba. Fayard está convencido que un antiguo comisario está protegiendo a los principales sospechosos. Cuando se dispone más pruebas con las que acorralar a este antiguo comisario, éste es hallado muerto.