Luisa, de 45 años, regresa de un centro psiquiátrico después de una severa depresión postparto. Su deslumbrante hogar se vuelve su nuevo lugar de confinamiento, rodeada de su familia y una cuadrilla de empleados que se esfuerzan para que sus arrebatos permanezcan invisibles. Imposibilitada de seguir interpretando el rol de esposa y ama de casa perfecta, su única escapatoria es deslizarse elegantemente hacia la locura.